HABLEMOS DE MARÍA...

“Día y noche, noche y día en armonía con maría, mientras en el aire flota suave esta melodía, con mi dama en pijama, quemando ramas sin drama, me llama la Pachamama y en medio del panorama, se murmura que no es cura la verdura que en la locura me cura cuando sale el sol o en la noche oscura. Poco a poco a este coco se le prende el foco, la toco y ella provoca ponerme loco. Vas a estar quemando el gras al son del compás, en la calle hay guerra y no legalizan la paz. Bandera blanca, inhalo el humo, todo perfumo, consumo el Bonsái, luego me esfumo a mi zona, aunque la justicia me presiona, enciendo la fruta que crece en el Amazonas. Razona, esto brota de la tierra natural, pero para muchos sigue siendo ilegal… Lánzalo, lánzalo, lánzalo, lánzalo, oh…” (El Paisa Noche y día, 2011)

¿Lo leíste cantando?... Si fue así muy probablemente ya sabes de qué tratará este post… O muy probablemente conoces bien quién es María… Mejor dicho, qué es.

María, maldy, mota, huiro, Mary Jane, hierba, ganja o simplemente marihuana es una mezcla gris verdosa de hojas, tallos, semillas y flores secas picadas de la planta de cáñamo: Cannabis sativa (National Institutes of Health, 2005). Según DEVIDA (2013), es la droga ilegal más consumida en el Perú actualmente y su uso es más frecuente en jóvenes que se encuentran entre los 12 y 18 años de edad.

¿Cuál es el problema con esta hierba?... Aquí no vamos a hablar de la legalización, restricción o penalización de su consumo, pues aun así exista una pena de hasta 27 años de cárcel por la posesión mayor a 8 gramos de marihuana muchos siguen y seguirán haciendo uso de ella. EL VERDADERO PROBLEMA AQUÍ ES LA DESINFORMACIÓN DE LOS CONSUMIDORES. Por ejemplo, muchos alegan que María al ser una planta –es decir natural- tiene propiedades curativas y es beneficiosa para el organismo… Pero ¿Qué pasa en realidad? ¿De verdad su consumo es favorable?

Dejo que deduzcan la respuesta a partir de lo siguiente: Años atrás la marihuana que se comercializaba mantenía un 3% de THC en su composición. En los últimos años este porcentaje se ha triplicado (de 9 a 10%). Esto quiere decir que lo que consumen la mayoría de jóvenes adolescentes en el Perú ya no es una planta “natural” sino la mutación genética y sintética de esta.

Pero ¿Por qué el porcentaje de THC es tan importante?... ¡Simple! Porque es el agente químico de la marihuana que produce los siguientes efectos físicos y psicológicos: Signos de dependencia - adicción, trastornos en la memoria y la concentración, problemas o cáncer en los pulmones, alteraciones en el sistema reproductor e inmunológico, psicosis y cuadros delirantes alucinatorios, ruptura del umbral del placer, distorsión en lo percibido, entre otros. Esto significa que al haber más cantidad de THC, existe una mayor probabilidad de desarrollar cualquiera de estas consecuencias perjudiciales para nosotros y nuestra salud.

Apuesto a que no sabías esto último. No te culpo. La mayoría de nosotros a penas y nos estamos enterando… Esto evidencia, como mencione líneas atrás, el principal problema: LA DESINFORMACIÓN. ¿CÓMO DARLE SOLUCIÓN A ESTA?... En primer lugar, que tanto padres como maestros dejen de considerar a las drogas como un tema tabú. La mayoría de adolescentes averiguará sobre las drogas por su cuenta, pero necesitan de fuentes confiables que les brinden información verídica y ¡Qué mejor para esto que su mismo colegio u hogar! Es primordial que este tipo de información llegue a nuestros niños y jóvenes para protegerlos, protegernos a nosotros mismos, PROTEGERNOS NO SOLO COMO PAÍS SINO COMO PERSONAS.

Figura. Consumo de marihuana en la adolescencia
Fuente. http://www.salud180.com/